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 Los amarguillos son unas pequeñas pastas, generalmente de forma circular, de color tostado (al ser un producto horneado), brillante por su baño con huevo, de aproximadamente un diámetro de 5 cms. Suelen ir coronadas por una almendra tostada.
La textura es la de una pasta de similares característica, si bien esa granulosidad acentuada viene dada por llevar entre sus ingredientes la almendra. Entre sus ingredientes básicos está la harina, los huevos, la almendra y las obleas utilizadas como base para los amarguillos.
Es un dulce típico de la localidad leonesa de Sahagún, pero su elaboración se ha extendido por otros lugares de la provincia, y diversas confiterías de la ciudad de León.
También son muy conocidos los amarguillos del Monasterio de Santa Cruz, que venden una cajas de medio kilo de peso, aproximadamente, de este típico dulce. En las confiterías es habitual venderlos al peso al igual que se hace con otro tipo de pastas.
Hay que tratar de conservarlo en lugares frescos y secos, ya que su alto contenido en almendra pueden hacer que se resequen demasiado y no ser demasiado agradable al paladar sino está en sus óptimas condiciones de consumo.
Este dulce típico no es demasiado conocido entre los turistas que nos visitan, ni seguramente entre muchos ciudadanos leoneses, por lo que no cuenta con la gran distribución con la que cuentan otros productos más típicos (como mantecadas y hojaldres de Astorga, etc.).
No obstante, si desea probarlos, es fácil que en muchas de las pastelerías de la ciudad puedan encontrar algún tipo de amarguillo de elaboración propia.
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